Comenzando el día tuve la oportunidad de echar un polvito con Alana Lace y disfrutar de su gran busto natural. El cual se encuentra bastante firme y carnoso. El encuentro carnal tuvo lugar cuando Alana estaba intentando seducirme con una sensual mirada mientras llevaba puesta una blusa que estaba para arrancársela con los dientes. Ella tomó la iniciativa y dejó al descubierto uno de los melones, mi instinto masculino me llevó a sentirlo con mis propias manos y al ver que no opuso resistencia iniciamos el juego.
Después de habérmela comida a besos me practicó una mamada increíblemente placentera lubricando mi miembro. Para luego llevarlo entre sus tetas y estimularme con masturbación mamaria. Me excité tanto que tomé el control, la posicioné reposando la cara sobre la cama. Le penetré hasta agotar mi último porcentaje de energía, pero sin duda lo mejor fue acabar en sus deliciosos pechos.
